“El Congreso de Vida Consagrada (VC) 2015 pretende ser una experiencia de gracia, que nos ayude a descubrir los horizontes de novedad en la vivencia de nuestros carismas hoy para comenzar una etapa nueva, ‘Escuchar a Dios donde la VC clama’; así, nos lleva y llevará a vivir confiadamente un presente que tiene futuro y a transformar nuestra vida y misión”. Con estas palabras, que se encuentran al inicio del Instrumento de Trabajo del Congreso de VC, la CLAR invita a los participantes a “sincronizar sus expectativas” con el triple llamado del papa Francisco, con ocasión del Año de la VC: “(1) Mirar con gratitud el pasado, para volver a las fuentes del Evangelio, recuperar el legado del Concilio Vaticano II y el de la VC en América Latina y el Caribe, en los últimos cincuenta años; (2) vivir el presente con pasión, para escuchar los clamores de la VC y lo que el Espíritu dice a la Iglesia, a la luz de la Exhortación Apostólica Evangelii Gaudium; y (3) abrazar el futuro con esperanza, para abrirnos a la confianza, la creatividad y el diálogo, en medio de las incertidumbres que caracterizan a los tiempos actuales”.
El Instrumento de Trabajo es un documento breve e inspirador, propositivo y profundo, en el cual se insinúan las grandes apuestas del Congreso, a partir de cinco cuestiones fundamentales que corresponden también con las dinámicas asumidas metodológicamente, a modo de clamores (ver), convicciones (juzgar) y compromisos (actuar):
- ¿Por qué un Congreso de VC?
- ¿Con qué lema, con qué tema y con qué dinámica?
- ¿Para identificar qué “clamores” de VC?
- ¿Qué “convicciones” nos conducirán a una nueva forma de VC?
- ¿Por cuáles caminos concretar “compromisos” para una VC nueva?
Con audacia, el Instrumento de Trabajo plantea que ante la encrucijada histórica en la que se encuentra la VC hoy, hay motivos de peso que imprimen urgencia y radicalidad al apremio de celebrar un Congreso de VC “para transformar algunas de las tareas concretas en indispensables. De hecho, la VC en este momento clama y su clamor agranda y acerca los horizontes de novedad en la vivencia actual de nuestros carismas; éstos se convertirán en un marco referencial de nuevas propuestas, para diseñar y asegurar una etapa nueva”.
Identificados y situados en su contexto, los “clamores” de la VC mostrarán qué está impulsando y/o bloqueando la acción del Espíritu en la VC. De hecho, “la CLAR lleva años haciendo y promoviendo un movimiento de discernimiento, orientado por una mirada hacia adelante. Este Congreso es un paso más, en esta dirección. Su nombre y sus rasgos concretos se sitúan en una búsqueda de nuevas formas de VC”.
Frente a las “convicciones”, el Instrumento de Trabajo destaca los signos de vitalidad que hoy emergen, inspirados por el Espíritu, así como las condiciones para verlos, los criterios para describirlos y sus expresiones fundamentales.
Así mismo, el Instrumento también postula que para concretar “compromisos” que conduzcan hacia una VC nueva, es preciso desencadenar procesos y asumir formas nuevas de VC, dando pasos “hacia paradigmas más exigentes, que harán emerger, aún en la fragilidad, el rostro nuevo de una VC pascual, servidora, enriquecida por el testimonio de los mártires, y de mujeres santas y hombres santos”.
Finalmente, el Instrumento de Trabajo da pistas para una VC transfigurada y pascual, marcada por el Evangelio, la vivencia profética y creativa de los carismas, la adaptación de los carismas a las condiciones actuales, la misión en lugares de frontera, los cambios estructurales y la misión compartida con los laicos, entre otros aspectos fundamentales.
El Instrumento de Trabajo ya se encuentra disponible en la web de la CLAR y será divulgado en diversos medios y espacios, tanto de reflexión –por ejemplo la Revista CLAR No. 1 de 2015– como de animación de la VC. Sin lugar a dudas, se trata de una “carta de navegación” para quienes se preparan para participar en el Congreso.
